Se nota que tu hermano Álvaro estaba bastante ocupado en esos años, los 80, tratando de salir adelante después de haberse recibido de arquitecto y organizando una empresa constructora. Te manda una carta felicitándote por el nacimiento de tu hija Camila. Trata de continuar la carta unos días después, pero solo alcanza a escribir la hora en que lo intentó, las 22:37. Trata de presentar sus aforismos a un concurso literario, y llega pocos minutos antes de que venciera el plazo.
Recuerdas que tu hermano asistió al Taller literario de Enrique Lafourcade, pero tú ya estabas en USA y poco conversaron de eso. Tu madre, sin embargo, nunca asistió al Taller de Lafourcade ¿Por qué no lo hizo? Por la Internet te enteras sobre la triste noticia de que el escritor Enrique Lafourcade acaba de fallecer. Por WhatApp alguien te cuenta que Enrique Lafourcade, en su juventud, se había enamorado perdidamente de tu madre. Él formaba parte del coro de la Universidad de Chile y quería que tu madre también se metiera al grupo. Pareciera que realmente la quiso mucho porque cuando Lafourcade hablaba con esa persona que te contactó por WhatsApp (que se parece un poco a tu madre), se transportaba y le decía «Ximenita». Quizás por eso tu madre nunca asistió a su Taller Literario, Cristián. En todo caso, estuviste a punto de no nacer, de ser literalmente “un don nadie”.
En la carta menciona también al cura Gaete, compañero de casa de Renato Poblete, acusado hoy de tremendo abusos sexuales y de todo tipo. Pareciera que lo que veías como algo permanente en tu pasado ahora se desmorona. Aquí va la carta:
01 de Julio de 1988
Queridos Pilar y Cristián
Para qué comenzar esta carta pidiendo disculpas por no haber escrito antes. Si lo hiciera, todas las cartas que escriba en mi vida comenzarían así, por lo tanto hoy haré la excepción (para confirmar la regla).
Bueno, basta de leseras. Primero felicidades por Camila. ¡Felicidades! Manden una foto de ella. Con Marlen les mandamos de regalo una parca (la semana pasada me dijo que la mandara luego, antes de que le quedara chica). Ojalá les guste. Y espero que quepa en el correo, o se las lleva el papá.
Son las 12:32 del día y estoy en mi oficina, en el piso 13 de una de las Torres de San Borja, ubicado en Lira con Diagonal Paraguay. En verano –desde donde estoy ahora- se ve la cordillera y se distinguen las casas de los faldeos de La Reina. Ahora no hay más de 500 metros de visibilidad, parte por el día nublado y gran parte por el smog el que nos tiene medio ahogados este invierno, ya que casi no ha habido lluvias y las micros y buses se pasean fumigando la ciudad.
La semana pasada recibimos el cuento. Ya le sacaron fotocopia y Mónica lo va a presentar al concurso. Yo, por mi parte, me presenté 20 minutos antes que finalizara el plazo de entrega final para otro concurso -en Poesía- llamado Premio Alonso de Ercilla y Zúñiga. Presenté mis aforismos. Llegué corriendo, transpirando, en los últimos minutos. No pierdo las esperanzas de que pueda sacar algo. En tu cuento, Cristián, leí algunos de mis aforismos. Me encantó hacerlo, aunque no lo leí completo (solo el comienzo). Lo encuentro muchísimo mejor, más ordenado. Lástima que en esto de literatura y arte uno nunca deja de corregir. Yo desde que estoy construyendo he dejado de escribir. La revista Quimera la encontré muy entretenida. Allá (EE.UU) se escribe tan distinto, son totalmente distinto los temas y hay para todos los gustos. Gracias.
5 de Julio de 1988
Son las 22:37 …………(¡y no te contó nada más!)
6 de Julio de 1988
…¡poco me duró la inspiración de anoche! Ahora son las 18:19. En estos precisos momentos deben estar hurgueteando el abdomen de Aída (esposa de tu hermano Alberto). A las 17:00 entraba a pabellón para sacarle la vesícula. Acá en Chile esa operación es muy común. Al papá de Marlen lo operaron de lo mismo hace tres semanas. Todos están tranquilos. Aunque dudo que nos sintiéramos así si fuera uno el operado.
El domingo pasado estuvimos con Alberto (hermano mayor) y Aída en su casa almorzando. Fuimos con Marlen, el papá, la Mónica y Pato. Con Marlen somos los padrinos de la Francisca (hija de Alberto). Bautizaron a todos los hermanos (Fernando, Cristóbal, Felipe, Francisca, todos hijos de Alberto) junto a un lote de otras guaguas. Gaete (sacerdote jesuita, hoy fallecido) hizo la misa. A las tras guaguas, eso sí, Gaete casi no les daba bola. En el desorden más de alguna guagua pudo no haber sido bautizada. Un matrimonio tuvo que llamarlo y hacerle ver que aun no le había echado agua a la cabeza de su guagua. Estoy exagerando un poco ….pero desorden hubo. La mamá años atrás, y uno por uno, ya había bautizado por su propia cuenta a todos los hijos de Alberto, menos a Felipe. A uno en el lavatorio, otro quizás en la tina. Yo encuentro eso divertido, pero resulta que la Iglesia lo admite. La Marlen, cuando chica, al escuchar a su mamá decir que cualquier persona podía bautizar a una guagua, salió al patio y durante semanas se paseó con agua por el patio bautizando gallinas.
Bueno, si no termino luego, esta carta se va a sumar a ese saco lleno de proyectos de cartas de no más de un párrafo que comienzo y luego no termino. Así es que mejor me despido deseándoles un montón de felicidades y esperando poder recibir una carta de ustedes.
Los recuerdo siempre con mucho cariño.
Álvaro
PD 1. Saludos de Marlen (estoy en este minuto hablando por teléfono con ella).
PD 2. Ayer escuchamos por primera vez a Camila llorando por teléfono.
PD 3. Cristián te mando un recorte de un concurso de la Cámara Chilena del Libro.
PD 4. El regalo para Camila no cupo por correo. El papá se los va a llevar.
Ahora es tu padre quien te escribe. Te pregunta por Pilar, ¿Cómo está Pilar?
-Bien le contestas ahora y con 30 años de atraso, en el 2019. Bien y feliz porque ya no vomita. Le han venido ataques de amor por Camila. Le cuesta tremendamente y sufre pensando que tiene que regresar a su Tesis que es su trabajo.
¿Cómo les ha cambiado la vida con la llegada de la hija?
-Mucho. Ha sido un tremendo terremoto que los ha dejado asustados. Si antes, al menos tú, no te sentías preparado para nada, con Camila seguías pensando lo mismo pero como en tantas oportunidades importantes simplemente le echabas para adelante. Fue un mazazo grande que en el fondo les gustó mucho porque literalmente le estaban cediendo vuestro puesto -en un mundo cada vez más pequeño- al que sigue, a otra personita que a lo mejor se lo tiene más merecido y lo hace mejor.
¿Cómo lo están pasando?
-Asustados. Pero lo interesante es que pese al susto, no dejas de tratar de hacer las cosas lo mejor posible; peso al susto, pese al temor y pese a vuestras debilidades lo siguen haciendo como si todo siguiera igual. Fue la valentía del ignorante.
Aquí va su carta donde como siempre le pasa revista a su rebaño completo. La actividad política se centraba principalmente en el plebiscito. Cada vez que lees estas cartas borras el calendario:
Viernes 17 VI 88
Mi querido Cristián
Como ya te dije por teléfono estamos felices por el nacimiento de Camila Ximena. ¡Felicitaciones a la mamá y papá! Ahora empezarán la etapa mas hermosa de la vida, como es ver crecer, cuidar y ver desarrollarse a un hijo. Van a tener muchas felicidades con esa niña, que aún sin verla ya la conozco. ¿Cómo está Pilar? ¿Cómo les ha cambiado la vida con la llegada de la hija? Espero estar en Cleveland el sábado 16 de Julio. La mamá llegará el jueves 21. Estamos hasta el 1º de Agosto. ¿Cómo lo están pasando? ¿Cómo está el clima? ¿Qué has sabido de Gonzalito? Vivimos muy preocupados de ellos y que encuentre una fuente de trabajo.
Acá las cosas siguen la rutina de siempre, con la ilusión del plebiscito, y que no sabemos si va a ser una cosa seria, o un nuevo fraude.
Álvaro (mi hermano menor que empezaba su empresa constructora) está trabajando con mucho empeño y creo que saldrá adelante.
Mónica (hermana) y Pato todavía no bien enchufados, pero pronto tendrán oportunidades de salir adelante con algunos proyectos que tienen.
Alberto (hermano mayor) trabajando bien en Diálisis.
A ti Cristián, te felicito por la decisión de volver a la Universidad. La empresa en que estabas no corresponde a tu alta calidad científica. Reciban de tus hermanos y mío un cariñoso abrazo y beso tu, Pilar y Camila Ximena.
Juan
¿Qué diría tu padre si le pasara revista a su rebaño este año, en el 2019? ¿Se vería optimista y feliz con los resultados? ¿Estaría orgulloso de ustedes y lo que han logrado? ¿Estaría feliz de tu hermana Mónica? ¿O de ti, qué diría de ti? ¿Qué diría de tu hermano, Alberto? ¿O Gonzalo? ¿O Álvaro, que cuando chico le decían el ‘Plito’? ¿Sigue siendo tan Plito como antes? ¿Te preguntaría qué piensan ustedes de él? ¿O de tu madre?…… ¿O de Renato Poblete?